Hoy consideremos el siguiente:
No te enojes ni reacciones automáticamente.
Primero tomemos conciencia qué cosas nos afecta. El enojo es uno de los peores daños que podemos hacernos a nosotros mismos, aunque siempre nos justificamos viendo que nos enojamos con otros o con circunstancias. ¡Es posible aprender a no enojarse, si anhelo unirme al Amor!.
No hay comentarios:
Publicar un comentario