"El tema o tarea de ser sí mismo, del llegar a ser el que se es, lleva consigo la empresa dramática, aventurera y esperanzadora de la aceptación. El hombre se rebasa a sí mismo, se trasciende y se salva (salvarse es ser maduro y sano) en y con la aceptación de todas las realidades de su vida.
Aceptar la luz y la sombra sin asustarse, si huir. Aceptar lo femenino y lo masculino, aceptar las edades de la vida con sus peculiaridades reales y así sucesivamente, el hombre así se convierte en un consciente ser hospitalario. Ni Prometeo, ni Fausto, ni Zaratrustra, sino benevolente hospedero de la realidad.
Este proceso de aceptación tiene unos medios de ejercicio. Estos medios son la ascética, la meditación, todo lo que las religiones han ofrecido a los hombres desde milenios."
Tomado de "La Mitad De La Vida Como Tarea Espiritual" de Anselm Grüm
Imagen tomada de http://www.secretia.com
NO ACEPTAR LA REALIDAD Y LAS REALIDADES QUE NOS PRESENTA LA VIDA, ES COMO PARTIR DESDE UNA PREMISA FALSA Y EQUIVOCADA, Y LO QUE VIENE, DESPUÉS DE UNA PREMISA EQUIVOCADA, "ES UN DESARROLLO Y UNA CONCLUSIÓN EQUIVOCADA". POR TODO ESTO, ES DECIR: "POR COMPRENSIÓN", ES QUE HAY QUE ACEPTAR SIEMPRE LA REALIDAD.
ResponderEliminarMI AGRADECIMIENTO AL DR. SOLÓRZANO POR SUS ENSEÑANZAS. V. R. CIRIELLO
Tu reflexión es muy cierta,lo que puede ser un pequeño error al principio, con el transcurrir de un proceso se puede transformar en una aberración.
ResponderEliminarGracias por participar.