lunes, 30 de mayo de 2011

La Mitad de la vida (27)


La experiencia de que Dios nos conduce a un doloroso conocimiento de nosotros mismos en la mitad de la vida la ha tenido también Carlos Carretto. Sobre ella escribe:

«Normalmente esto ocurre hacia los cuarenta años: gran fecha litúrgica de la vida, fecha bíblica, fecha del demonio meridiano, fecha de la segunda juventud, fecha seria del hombre... Es la fecha en que Dios ha resuelto poner entre la espada y la pared al hombre que se le ha escapado hasta ahora detrás de la cortina de humo del «mitad sí, mitad no». Con los reveses, el tedio, la oscuridad, y más frecuentes aún, y más profundamente aún, la visión o la experiencia del pecado. El hombre descubre lo que es: una pobre cosa, un ser frágil, débil, un conjunto de orgullo y me mezquindad, un inconsciente, un perezoso, un ilógico. No hay límite en esta miseria del hombre; y Dios le deja que la beba hasta las heces... Pero no basta. En lo profundo está la culpa más decisiva, más vasta aún, aunque oculta... Sólo a duras penas y frecuentemente sólo después de largo tiempo podemos descubrirla con la mirada, pero es bastante viva en la conciencia para poder contaminarnos y pesa bastante más que todas las cosas que confesamos habitualmente. Quiero decir las actitudes que envuelven toda nuestra vida como una atmósfera y que están presentes, por decirlo así en todas nuestras acciones y omisiones; pecados de los que no podemos desembarazarnos, cosas ocultas y generales: pereza cobardía, falsedad y vanidad, de las que ni siquiera nuestra oración puede verse enteramente libre, que pesan profundamente sobre toda nuestra existencia y la perjudican.» (Cartas al desierto, cap. 10)

Esta cita muestra cómo la experiencia de Tauler no es única ni está limitada los místicos. Afecta a todo aquél que intenta llevar una vida espiritual. Por eso es importante entender algo de las generalidades de la vida espiritual para poder ayudar a los hombres que sufren esta crisis como un paso de su desarrollo religioso.
Tomado de "La Mitad De La Vida Como Tarea Espiritual" de Anselm Grüm

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